Best-sellers y cine

Leo la nota de Gonzalo Garcés en la Ñ (edición 5/5/2007, Nuevos trapos)

Sobre las máscaras pesadas que usan algunos best-séllers (los históricos, que siguieron la fórmula de El nombre de la rosa, de Umberto Eco) para ocultar su carencia artística y abordar el reconocimiento académico. El caso que le sirve de ejemplo es el del libro Las Benévolas (Las Bienveillantes, de Jonathan Littell), suceso editorial.
Dice:“(…) Ahora bien, el best-séller se distingue por trabajar dentro del estricto sentido común, recombinando valores aceptados y sosteniendo el interés por el suspenso y el interés especializado (…)”Y después agrega que la prueba de fuego está en la lectura: 

“(…) En esa agradable ligereza al pasar las páginas, en esa impresión de acceder a ambientes bien recreados, en esa magistral tensión al acercarse al final, en esa miserable certeza de haber perdido el tiempo.”

Hace poco pude ver Los fantasmas de Goya (Ghoya´s Ghosts, 2006) donde se nota la mano de Milos Forman y Jean-Claude Carrière. La película intercala hechos históricos mientras muestra a un Goya observador, perdido en esos hechos, con los que no puede hacer otra cosa que crear. No hay tensión de final sino abuso melodramático. La película entretiene y te lleva de la mano a ver algo que, se nota, pensaron los realizadores (el director y los guionistas) sobre el tema que abordaron. Así y todo, no es una película sobre Goya, ni una película histórica. No perdí el tiempo para nada.

Después veo Fur, Retrato de una Pasión (Fur: An Imaginary Portrait of Diane Arbus (2006), de Steven Shainberg (que hizo La secretaria) No es una biografía histórica, aclaran. Al comienzo la trama me viene como anillo al dedo, con música de Carter Burwell y todo, pero pronto noto los desgarros del telón, empiezo a ver al director, y al final ya me da bronca cuando la Kidman le dice a una tipa desnuda sentada a su lado: Contame tus secretos.

Parece que Shainberg gritara ahí: ¡Mirá cómo se hizo artista esa mina!. Y ¡la cara que pone la Kidman para recalcarlo! Qué desperdicio. Todo está digerido. La magistral tensión de acercarse al final. La miserable certeza de haber perdido la noche.

A. F.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s